Photo credit: bernat... / Foter / CC BY-NC-ND |
Apunto está de salir el sol por los Montes Cautivos cuando Sena llega a la habitación del Amaraun donde dejó ayer a sus amigos, no llama a la puerta y entra con cuidado. Praix no la percibe y ella se queda a observarle desde allí tan quieta como una cariátide. Él se afana en limpiar la sangre del torso de su amigo con gasas y una loción limpiadora, gasta cuidado y delicadeza al tiempo que sigue murmurando sus enigmáticos salmos sanadores. Sena guarda en secreto su amor de mujer por Praix y para no emocionarse con lo que ve, para romper el hechizo, habla en tono suave: -Buenos días, ¿qué tal se encuentra nuestro enlazador?
Praix contesta con un gesto de ignorancia resignada, casi apática. Se hace un silencio largo.
-¿Y tú, qué tal estás tú, Praix?
Otro silencio… Aunque esta vez quiso hacerse de plomo y quedó fijo en el suelo contaminando el ambiente con su color gris y su pesadumbre de plastilina hasta volverse incómodo como una cama de riscos. Praix bufó, paseó por la habitación con la urgencia de un loco perdido en una sala y el silencio de un verdugo prendido en los labios, acto seguido se echó a llorar como un fuerte viento a ras del océano y por un instante pareció ser otra vez de noche, sin que jamás hubiera existido este amanecer de Septiembre. Parecía habérsele caído el alma a los pies, los pies al infierno y el infierno a la cabeza.
-He podido rozar, solo rozar con mi magia empática su persona. ¡Créeme, Sena, está jodido! Es necesario que se recupere de este estado, cruzo los dedos para que así sea y nosotros hemos de ayudarle. Aparentemente está inconsciente mientras el mausand hace su efecto pero no es así, está tan despierto como tú y como yo pero no puede salir de su dolor, da vueltas y vueltas alrededor de él incapaz de escapar en un estado de sueño e insomnio a la vez. ¿Sabes eso de que la salida a un callejón sin salida es la entrada? Pues en este caso Jonás está dentro de un cubo, no hay salida ni entrada, y la sensación que tengo es como si temiera dañar a alguien o algo si escapara, que está preso en él por voluntad propia. Sena, tú y yo sabemos que es el mejor enlazador de los últimos tiempos y que podría conseguirlo por sus propios medios, el problema es que no quiere, es como, perdona que me repita, si temiera dañar a alguien o algo o como si quisiera protegerlo de sí mismo. He sentido su bloqueo, siente que solo por existir puede dañar aquello que ama, aún sin querer, y se siente culpable por ser. No sé, Sena, quizá haya sido invadido por un Mamu, quizás deberíamos alertar a la Niña-Reina, esperar a que sane por sí solo, no sé…
Praix a duras penas contenía las lágrimas mientras le contaba a Sena su experiencia empática y ella se había convertido en un deshielo mudo, nada quería decir ni nada podía decir. Se acercó hasta Praix con su cuerpo eterno de niña y le pidió por gestos que se agachara, tomó la cabeza sobre su pecho y con una imposición de manos le liberó de parte del dolor que se le había contagiado al empatizarse con Jonás, luego le rogó que se marchara a descansar y le besó en la mejilla. Lo contempló marchar con la mirada encendida hasta que cerró la puerta, ella se dirigió hacia donde yacía Jonás, tomo su mano y se concentró en transmitirle paz. Se aproximó a su oído y le susurro: -Estoy aquí, Jonás, yo te ayudaré a tejer tu traje y te cantaré mis canciones-. Sacó un pequeño bote de cristal que contenía un líquido denso como glicerina y que cambiaba de color y mojándose los dedos índice y corazón masajeó los ojos del enlazador.
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Aceite de oniria
Aceite de oniria
¡Cuánta ternura! Simplemente precioso. Un saludo
ResponderEliminarMuchas gracias, prima lejanísima... ¡Gracias!
EliminarPreciosos tus relatos. Ese estado de sueño e insomnio, es jodido. Así estamos la mayor parte del tiempo, ni despiertos ni dormidos. Es hora de despertar de una vez. Te quiero Rove con v, o con b, o ...
ResponderEliminarLe has pillao el gustillo a los puntos suspensorios, ¿eh? :)
Eliminar¡Un beso, madre!